Almenas barrocas y pórtico neoclásico

 

 

Sin salir de la zona de la calle Real donde pueden admirarse los pórticos mostrados en la entrada anterior, se halla una casa de una planta cuya factura produce una fuerte sensación de horizontalidad y cuya fachada posee elementos muy interesantes (ver la primera de las fotografías superiores). Quizás, lo primero que llama la atención es el conjunto de almenas desplegadas. En ellas, un elaborado diseño de líneas rectas y curvas se combinan para formar una traza barroca delante de pilares del tipo G02RECT, que están rematados con cuerpos de simetría cilíndrica y sirven de sustento a esbeltos adornos de cerámica vidriada de color marrón oscuro (segunda fotografía superior). Un magnífico pórtico de gran tamaño (primera de las fotografía inferiores), cuyo clasicismo contrasta con el perfil barroco de las almenas, incluye elementos típicos del estilo neoclásico tales como anchas pilastras y un friso dórico con sus triglifos y metopas, que alojan florones en relieve (segunda fotografía inferior). Finalmente, tres cierros con cubiertas triangulares (fotografía lateral), cuyos vértices superiores alcanza la cornisa del edificio, constituyen elementos que, junto con las almenas, aportan toques de verticalidad que equilibran el predominante carácter horizontal del lienzo de la fachada.
Hay que señalar que esta casa, que probablemente estaba destinada hace unos años a ser sustituida por un horroroso bloque de pisos, ha sido conservada y restaurada por su propietario de forma muy acertada, poniéndose así en valor las bellas almenas y el gran pórtico mostrados en las fotografías. Creo que es de justicia felicitar y agradecer a todas aquellas personas que contribuyen a conservar el patrimonio arquitectónico de San Fernando.